¿Cómo se Obtienen las Células Madre Sanguíneas?
Recolección de Células Madre del Torrente Sanguíneo
La mayor concentración de células madre sanguíneas se encuentra en la médula ósea. Sin embargo, las células madre sanguíneas se pueden mover o "movilizar" desde la médula ósea hacia el torrente sanguíneo (sangre periférica), donde se pueden recolectar fácilmente. El procedimiento para recolectar células madre del torrente sanguíneo se denomina recolección, cosecha o leucoféresis de células madre de sangre periférica. La recolección no es un procedimiento quirúrgico y, por lo general, se realiza en una clínica ambulatoria.
Antes de la extracción, recibirá inyecciones diarias de factor estimulante de colonias de granulocitos (G-CSF) para mover o "movilizar" las células madre desde la médula ósea hacia el torrente sanguíneo. Si no es posible recolectar suficientes células madre utilizando solo G-CSF, se pueden administrar medicamentos como plerixafor o motixafortide.
El medicamento que se utiliza para trasladar las células madre desde la médula ósea al torrente sanguíneo puede provocar dolor y algunas molestias en la zona lumbar y las caderas. El dolor es similar a los dolores corporales que puede experimentar con la gripe y, por lo general, desaparece cuando se dejan de administrar las inyecciones diarias.
Cuando llegue el momento de recolectar las células madre, se sentará en una silla cómoda.
- Se insertará una aguja conectada a un tubo flexible en una vena de cada brazo.
- Se extraerá sangre de un brazo y se pasará por una máquina que separa las células madre.
- El resto de la sangre se le devolverá a través de un tubo flexible que está conectado a la aguja que se insertó en el otro brazo.
Si tiene venas pequeñas en los brazos, se pueden recolectar células madre a través de un tubo flexible especial que se inserta en una vena grande cerca de la ingle o debajo de la clavícula.
Dependiendo de la cantidad de células madre recolectadas durante cada sesión, puede llevar de uno a cinco días recolectar suficientes células madre para el trasplante.
Algunas personas sienten mareos, frío o entumecimiento alrededor de los labios durante la extracción. Otras experimentan calambres en las manos causados por un agente anticoagulante utilizado durante el procedimiento que reduce el nivel de calcio en la sangre. Los calambres generalmente se resuelven después del tratamiento con suplementos de calcio o suspendiendo temporalmente el procedimiento.
Otros posibles efectos secundarios a corto plazo incluyen dolor de huesos, dolor de cabeza, fatiga y náuseas.
Recolección de Células Madre de la Médula Ósea
Este tipo de recolección de células madre se denomina recolección de médula ósea. Es un procedimiento quirúrgico que se lleva a cabo en el quirófano de un hospital.
Mientras se encuentra bajo anestesia general o raquídea o sedación moderada, se le insertará una aguja en el hueso posterior de la cadera, donde se encuentra una gran cantidad de médula ósea. La médula ósea, un líquido rojo espeso, se extrae con una jeringa. Luego, la médula ósea se puede congelar hasta el día del trasplante.
Se necesitarán varias punciones en la piel de cada cadera y múltiples punciones en los huesos para extraer suficiente médula ósea. No se realizan incisiones quirúrgicas ni puntos de sutura, solo punciones en la piel donde se insertó la aguja, que se cubrirán con un vendaje estéril.
La cantidad de médula ósea extraída depende del peso del paciente trasplantado y de la concentración de células madre sanguíneas en su médula.
Por lo general, se extraen entre uno y dos cuartos de galón de médula ósea y sangre. Si bien esto puede parecer mucho, el cuerpo generalmente puede reemplazarlo en cuatro semanas.
Cuando pase el efecto de la anestesia, es posible que sienta algo de molestia en el lugar de la extracción. El dolor será similar al que se produce al sufrir una caída fuerte sobre el hielo y, por lo general, se puede controlar con paracetamol (Tylenol®).
La mayoría de las personas puede reanudar sus actividades normales en unos días, aunque actividades como subir escaleras o permanecer sentado en un mismo lugar durante un período prolongado pueden resultar incómodas durante una o dos semanas. También se le recomendará que evite levantar objetos pesados durante dos semanas.
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